20100316

Crónicas de un pirata arrepentido - Conversión

Duke Nukem, Doom, Windows, Corel Draw, Word... toda una orgía de software ilícito en mi "enorme" disco de 420Mb.
Pero no pasaba nada, todo el mundo lo hacía, era imposible reconocer el delito. Y en plena apoteosis respaldada por el término "todo el mundo lo hace", estándo plenamente inmerso en aquella secta de expolio sin medida (habían programas que la gente se los instalaba pero jamás los utilizaba, yo incluido, porque tenían un aspecto complejo y sofisticado pero eran eso, complicados de utilizar, como los compiladores de sonido MOD y MID), apareció una palabra delante de mis ojos, leyendo una conocida revista informática: Linux.

Pero... ¿que es eso a lo que han dedicado un reportaje de 5 páginas?. Leyendo descubrí que era un novedoso y complejo sistema operativo, muy utilizado en las universidades, también por hackers y como firmware de aparatos de red, de marcas no muy conocidas.

Seguí leyendo y me quedé atónito de comprender que aquello no terminaba en un simple sistema operativo, era una comunidad de guerreros, cansados del sofware privado, poco flexible a modificaciones o adaptaciones y altamente remunerado (recordad precios del post anterior, para la calidad del software), que pretendían hacer de aquello toda una nueva filosofía de vida, de hacer las cosas.
Pero, ¿cómo pretendían hacer aquello?, pues sencillamente consiguieron escapar en barcaza de la corriente "todo el mundo lo hace", para crear un nuevo canal con una nueva corriente "si no puedes conseguirlo, hazlo tu mismo" ("If you can't get it, do it yourself").
Guau, que atrevido, pero eso es complicadísimo, ¿como diablos puede uno que no tenga ni idea, fabricarse un Word?. No podía entender cómo pretendían que aquello funcionase. Así que sin más, lo olvidé.

Volviendo a nublar mis intenciones de subirme a la barcaza de aquellos pirados, me dediqué a seguir creando programas y juegos con aquel software que me "regalaron" en la papelería.
Alguno de los programas que terminé y que tenían cierta calidad:



- Un TPV para la tienda donde estuve trabajando: ArchiTPV. Estuvo funcionando perfectamente y a una velocidad endiablada (por su sencillez), durante dos años. Aquel software me hizo ganar bastante dinero, tanto, que pude adquirir un nuevo y flamante ordenador ;D.



- Un navegador, basado en el motor del I.E. 5.0: XPlorer. Con un interfaz ligero, para aprovechar al máximo la visión de las webs, con un arranque muy rápido y también muy rápido para navegar, porque reducía los "timings" de espera de los motores de script (como hacen ahora muchos optimizadores de firefox). Además poseía atajos de teclado muy útiles, como uno que hacía desaparecer el navegador "instantáneamente" de la pantalla. Os podéis imaginar los beneficios de esto, en muchas situaciones, jejeje.


- Un reloj analógico: ClockAL. Bastante chulo para la época, que podía utilizarse como despertador y que las melodías podían ser cualquier WAV o MP3. En una época en la que los ordenadores era individuales, no se conectaban a ningún sitio, era muy complicado conseguir programitas que hiciesen estas cosas (ahora sería muy sencillo).




- Un juego que simulaba "la bolsa". Recordando un viejo juego de mi Amstrad fabricado por una empresa de Albacete, me inspiré para esta creación. Con eso y preguntando a gente que entendía de ese mundo diseñé "Marketplace". El interfaz gráfico era orientado a carácter, es decir, estaba diseñado en qbasic para MS-DOS. El juego permitía que no fuese necesario realizar algo demasiado visual, por ello elegí aquella solución. Aquella ventaja, permitía ejecutar el juego sin necesidad de Windows (como la mayoría de la época: Sim City, Doom2, Incredible Machine, Prince of Persia...). Existía una sección con más de 40 empresas, con información de sus cotizaciones, número de acciones totales, histórico de noticias que han influenciado los valores... Jugando, temporalmente eras alertado con aleatoriedad por noticias de todo tipo que influenciaban las cotizaciones, como incendios en petroquímicas, despidos masivos, huelgas, accidentes aéreos, OPAs... Está mal que lo diga, pero resultaba bastante interesante. Una de mis mejores creaciones completas, cuyo código fuente he perdido fatalmente por culpa de algún virus en alguno de los miles de formateos de disco.

- Otro proyecto reciente, ha sido un sistema de vigilancia casero, compuesto en principio por 2 webcams, pero que admite más. Detecta movimiento y pienso ampliarlo con un móvil que me llame si ha detectado algo extraño. Este servicio, adquirido total o parcialmente a una empresa, resultaría carísimo para la necesidad real. Parcialmente me refiero a comprar dispositivos o software, que permitan conectar las webcams ya disponibles.



Sin ser consciente, estaba haciendo uso del "si no puedes obtenerlo, hazlo tú mismo". Forma parte de mi espíritu. Mucha gente lo tiene, enseguida los reconoces sobre los que son puramente consumidores.
Claro que se gasta demasiada energía y tiempo en vivir de esa forma, pero cuando utilizas algo diseñado por tí mismo y encima resulta funcional, te sobreviene un sentimiento de satisfactoriedad. Lo que desearías es que más gente pudiese utilizarlo y criticarlo, para poder mejorarlo e incorporarle nuevas ideas ajenas. Lo malo de aquel momento es que los únicos canales de distribución a gran escala eran las grandes corporaciones de software, las cuales seguramente lo rechazarían o pedirían una gran suma inicial para comenzar la distribución y poder publicitarlo. Cualquiera de las dos opciones harían fenecer inmediatamente el entusiasmo de aquella creación.

Sin ser consciente estaba haciendo uso "de facto" de la filosofía del software libre, pero como la única fuente de información fue aquel artículo con tintes comerciales y además le restaba mucha importancia a aquella revolución, no supe ver la conexión y seguí a mi marcha de producir software "libre" y distribuirlo, por mis propios medios (a la gente más cercana, claro).

En mi época de instituto, con 15 años, me junté con una persona muy friki de cualquier cosa que se enchufe a la pared y sirva para jugar. El Fers. Este sujeto (con cariño ;D), apuntilló mi vena de salir de aquel mundo y subirme a la barcaza, con nuevos juegos, de calidad increible. Además me enseñó que existían emuladores de PS-one para PC con los que no me haría falta comprar la consola para disfrutar de todos los títulos que tenía, sobre todo de mi apreciado GT2 (mi hermano tenía una PS-One y jugaba cuando tenía alcance a ella, poco). Además me mostró que adquiriendo una tarjeta de TV y con unos programas especiales, ¡¡¡podía decodificar el canal PLUS!!!, ¡el sistema nagravisión!. Guau Guau Guau..., por si era poco pirata, toma 2.
Y entonces, di media vuelta y volví a quedar hipnotizado para pecar una vez más.

Mucho tiempo estuve disfrutando de aquello y lo peor es que me convertí en sacerdote de aquella secta, enrredando a más personas y convirtiéndolos en acólitos de aquella infame forma de ser. Volví una vez más a guardar bajo llave, mi instinto productor.
Mi coleguita (el Fers), me mostró un día en su casa, en una revista de compra/venta de software y juegos, un pack de 4 cds con varias distribuciones Linux de la época. El pack costaba unas 4.000 pta, supuestamente caro para ser solo cargo del distribuidor. Pero entonces no había demasiados canales de distribución y prácticamente todos eran pagando.
La misma revista traía un reportaje, de 4 páginas, donde explicaba la história, posibilidades, manejo y aspecto de cada una de las distribuciones del pack. Suse, Red hat, Debian y Slackware eran las distribuciones.

Resultaba muy caro, pero ya teníamos mucha curiosidad porque además teníamos un amigo en la universidad al que le comentaron que eso de Linux es una caña, porque además no le afectan los virus. ¿No le afectan los virus? y ¿porqué?, ¿porqué los de Microsoft no han dotado a Windows 95 de semejante virguería?.
Entre 4 amiguetes decidimos poner dinero para comprar el pack y cada uno elegiría una distribución para su PC. Lo bueno del asunto es que no era necesario dejar de utilizar la opción win-pirate. Era posible utilizar ambos en el mismo disco, alternativamente.

Elnath, IceDreK, Fers y yo, Netaudi, así lo hicimos. Lo compramos y cuando lo recibimos, IceDreK eligió RedHat, Elnath eligió Debian (recuerdo que me contó que en la universidad le dijeron que era el mejor y más estable), Fers eligió Slackware (una de las más evolucionadas por ser la más antígua, además la única con opción en castillian), y yo elegí Suse (una windows-like, que pretendía hacer más fácil la conversión).

Lo bueno de Suse, es que siempre han tenido una filosofía Windows-like. Han querido adaptar el mundo Unix, al mundo Windows (sin perder la filosofía Unix), para que la forma de interactuar con el PC fuese lo más parecido posible y poder hacerlo llegar a mucha más gente.
Las otras distribuciones tenían antes muchos aspectos Unix-like que dificultaban el manejo, llegando incluso a parecerte ridícula alguna forma de hacer las cosas, al estilo Unix. Por ejemplo para abrir un archivo o programa desde un icono, solo había que hacer un click, en lugar de dos. Esto hacía muy dificil seleccionar varios para borrarlos, copiarlos o moverlos de sítio al estilo Windows, ya que al seleccionalos, se ejecutaban. Tenías para ello que utilizar teclas de control como apoyo, algo ridículo para un windowsero.

Todo caldosos, cada uno provó la suya durante un tiempo y fué evidente el resultado. En una de nuestras numerosas reuniones de café de entonces, comentamos las experiencias de cada uno y claro está, entrar en aquel mundo no fué tan sencillo como indicaba la revista. Hubo quien quedó muy despagado con descubrir que los programas tenían que ser específicos para este sistema, no servían los que utilizábamos en windows y claro está, muchos de ellos eran demasiado cutres visualmente, complicados de manejar y faltos de funcionalidad. Otros intentaron entrar por la puerta grande, haciendolo funcionar durante un tiempo, intentando entrar en aquel mundo y terminaron por quitarselo, descubriendo que muchos de los dispositivos hardware de los que disponían, no podían ser utilizados por falta de drivers.
¡Comprar una webcam para no poder utilizarla!... eso no podía ser.
Y también hubo quien ni si quiera pudo hacerlo funcionar. Claro está, hubo quien eligió una distribución demasiado complicada y demasiado difícil de configurar. A ello se le unía la falta de fuente de información (google no existía y los foros técnicos no eran muy comunes).

La conclusión de todo aquello fué la falta de posibilidades. Pero en general quedamos contentos de haber podido experimentarlo, ninguno consideró que había tirado el dinero.

Pero personalmente aquello me hizo pensar, recapacitar que sí era posible salir de aquel mundo Windows, cubriendo las necesidades con el otro. Utilizar únicamente software libre para toda la funcionalidad de un PC. Solo era cuestión de tiempo y de comprar el hardware de aquellas empresas que fabricasen drivers libres para aquel sistema o que fuesen compatibles con los del núcleo.

No solo mejoraba el aspecto de la gratuidad del software. Analizandolo profundamente, era la oportunidad para hacer que el PC, tu PC, eso que te ha costado un dineral, dedicase toda la potencia del sistema a usos puramente primarios. Nada de antivirus, antitroyanos, reparadores del registro del sistema, firewall externo al núcleo,...

Cuando adquieres un ordenador Windows, has de sobredimensionar mucho el uso que le vas a dar, porque has de tener en cuenta que a un Windows, es necesario acoplar un montón de herramientas de seguridad, de prevención o de reparación, que Linux no necesita (es un misterio, pero razones apuntan a estrategias económicas de Microsoft) . Si no instalas estas herramientas está super-verificado, que tu Windows muere con el tiempo.
Para hacer el mismo trabajo, Linux consume un 50% menos del sistema (ya sea RAM, disco, cpu...)

Además son de sobra conocidos los errores de Windows, sobretodo para las versiones anteriores al uso del núcleo NT: Win95, Win98 y WinMe. Estas versiones son las que se utilizaban en todos los entornos, casas, oficinas, aparatos diversos... Estas versiones conformaban un sistema operativo demasiado simple y muy delicado en cuanto a fallos. Las versiones Linux de entonces, solo podían compararse a las versiones de WindowsNT (el de servidores), porque tenían todas las características de estabilidad, seguridad y complejidad de éste y algunas cosas más. Por ello, sobre la misma máquina, resultaba muchísimo más estable que las versiones Windows de marras.

Por todas esas razones y por muchas más, descritas en la revista, se le veía muchas posibilidades a aquello, aunque dos de nosotros abandonase por completo la idea. Principalmente por la comodidad de que ellos prefieren todo hecho y listo para utilizar. No les gusta toparse con problemas que les hagan estudiarlo demasiado tiempo. Pero cada uno es como es, hay que respetarlo. Entiendo que se prefiera gastar ese tiempo en producir lo que quiera hacer: diseñar, crear o utilizar y que nada entorpezca esas tareas. Lo malo es que se quiera hacer aunque sea a costa de utilizar software pirata.

Tengo que agradecer a mis amigos la experiencia que me pudo aportar cada uno, que hizo que me catapultase ferviertemente a aquel mundo, e hizo que cada vez fuese más legal con la utilización de mi PC. Poco tiempo después de aquel momento, ya hacía las cosas con los dos S.O.: Windows y Linux. Cada vez eran más los programas que eran "Santificados".

Este ha sido el proceso de mi "Conversión".

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'--'-' Arditero

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